Prepárese. Los campings abren progresivamente sus reservas 2025 entre mediados de septiembre y mediados de noviembre. Ver la lista
Llueve, ¡qué bien!
-
3 minutos
- ¡Al agua!
- Para usted
- En portada
Frente a un chaparrón, tormenta o temporal, el abanico de opciones se cierra, o bien se apuesta por las actividades de interior o bien se juega bajo la lluvia. He aquí un pequeño kit de supervivencia para esos días en los que se esconda el sol…
La lluvia es divertida
¿Llueve? Toca calzarse las botas de agua y salir a chapotear a los caminos embarrados. Será la ocasión perfecta para conocer a aquellos pequeños seres a los que les encanta estar pasados por agua: babosas, caracoles, lombrices… Lupa en mano, sus hijos se lo pasarán en grande observándolos de cerca.
Si pasean por el bosque, la copa de los árboles les protegerá de la lluvia… ¡algo que deberá evitar a toda costa en caso de tormenta eléctrica!
La lluvia es hermosa
La luz de los días lluviosos es a menudo mágica. Antes de salir de vacaciones, invierta en una cámara de fotos estanca. En cuanto empiecen a caer las primeras gotas, póngase el chubasquero y salga a hacer un reportaje fotográfico por la ciudad o la naturaleza.
Con un poco de suerte, ¡podrá inmortalizar un bonito arcoíris!
I'm singing in the Rain !
¡A mojarse se ha dicho!
No va a dejar que decaiga el ánimo por unas míseras gotas, ¿verdad? ¡A mojarse toca! Póngase el bañador y ponga rumbo… ¡a la piscina! ¿Bañarse bajo la lluvia? Claro, ¿por qué no? Algunos de nuestros campings cuentan con piscinas cubiertas. ¿Ha visto lo previsores que somos? Los chapuzones y las brazadas en familia devolverán la sonrisa a todo el clan. Cuando salgan, ¡seguro que el sol vuelve a hacer acto de presencia!
No nos mojamos.
Un día de lluvia también es la ocasión perfecta para conocer lugares de indudable interés. Un museo, por ejemplo. Los museos de historia natural gustan especialmente a los niños.
Si está en la montaña, será la ocasión ideal para visitar el museo de la abeja o de la marmota. Más cerca de la ciudad quizás encuentre un planetario y, si está en la costa, seguramente tendrá un acuario cerca.
Nos recogemos.
Otra idea de lo más golosa: aproveche el mal tiempo para refugiarse en una cafetería con los niños: ¡marchando una de chocolate caliente para todos!
Lleve libros, cuadernos de colorear o un juego de mesa de bolsillo.
Por delante, una agradable tarde marcada por la tranquilidad…