La felicidad a la orilla del agua

¿Y si se aloja ahí, en primera línea, junto a la orilla del mar? Venga por aquí, acérquese más, ¡ahí es! ¡Ahí está usted! ¿Se está bien por aquí, no? En una parcela o un alojamiento “con los pies en la orilla”, ¡podrá disfrutar al máximo!

Pasear descalzo por la arena, tomar el sol deliciosamente, nadar temprano por la mañana y sentirse revitalizado, participar en concursos de castillos de arena... Imagine también las salidas en catamarán... y las puestas de sol en primera línea (que revolotearán por las redes sociales). Ya verá, la cercanía inmediata al mar transformará sus vacaciones. 

El coche ya no será necesario para llegar a la paya, tampoco tendrá que seguir horarios para ir a bañarse... ¡saboreará la libertad!

¡Tenga en cuenta que la versión “océano” le aportará los mismos resultados J!

Veamos, ¿y si prefiriera dejar sus maletas junto a un lago? Un lago, tampoco está nada mal... Aguas hermosas y apacibles de colores que se van trasformando a lo largo del día, un paisaje alrededor completamente magnífico, playas acondicionadas y agradables...

Y además, si le apetece, podrá practicar un deporte naútico diferente cada día: pedaló (para empezar suavemente), windsurf o kitesurf (para surcar las olas de arriba abajo y de abajo a arriba), paddle surf (para descubrir las islitas del lago a un ritmo más pausado). Asimismo, podrá deleitarse nadando, apreciando la suavidad del aire, o reposando la espalda sobre una tumbona.

En cuanto a los niños, no tardarán en hallar los toboganes, trampolines y mini-parques acuáticos o terrestres que rodean al lago... Sí, los campings a orillas del lago también poseen ese aire de paraíso terrenal.

Otra posibilidad más, otro ambiente: ¿ha probado ya las vacaciones en el río? Es bien simple, es garantía de serenidad, con «S» mayúscula. 

En pleno corazón de la naturaleza, en un entorno apacible y auténtico, fluye un río vivificante... ¡Mire! Ahí está, ¡a solo unos pasos de su alojamiento o parcela! En el río, cada baño se transforma en un momento de plenitud absoluta. El agua revitalizante, los chorros que masajean, el sentimiento de bienestar absoluto cuando uno sale después de haber nadado en sus aguas...

Los niños podrán construir hitos, comenzar su colección de guijarros o de maderas flotantes. Además, podrá regalarse una tarde de kayak o una salida en rafting en familia. ¡Sencillamente magnífico!